Estos colegios y escuelas son organizaciones que están apostando a un nuevo modelo educativo, entendiendo que las emociones juegan un rol importantísimo en las vidas de las personas. Se decidieron a trabajar de manera sistematizada y planificada el desarrollo de las habilidades emocionales y el autoconocimiento. Comprenden que un espacio destinado a que, tanto niños, adolescentes como sus familias, aprendan a gestionar sus emociones, son esfuerzos que tarde o temprano serán recompensados con creces.
Nosotros buscamos reconocerles el esfuerzo y el coraje que tienen al transitar el camino de la Educación Emocional, un camino que no tiene precedentes en el sistema educativo formal mundial. Sabemos que el mostrar experiencias exitosas es un modo de animar a la comunidad educativa a trascender muros, metacomunicando un mensaje muy importante y a la vez simple: “¡Sí se puede!”